Aquí tienes siete cosas que probablemente no sepas de nuestros animales para y de paso ya te enteras de que hay un proyecto innovador, desarrollado por un montón de socios del sector ganadero, tecnológico y de alimentación animal, que quiere ser transparente, sostenible y sincero con los consumidores, gracias a la tecnología blockchain. El Grupo Operativo Sostvan
Visión periférica
Las vacas y los toros tienen un campo visual muy amplio y panorámico, incrementado por la forma alargada de su pupila que les permite tener una visión panorámica de unos 300° sin mover la cabeza. Sin embargo, existe un ángulo muerto justo delante de su hocico, de unos 20 centímetros de anchura donde ven muy mal. Por así decirlo, son un poco miopes y ven muy bien los objetos cercanos, por ejemplo la hierba que están comiendo, pero les cuesta distinguir objetos lejanos.
Son muy sensibles a los cambios de luz bruscos y, pese al típico color rojo del capote del torero, no aprecian bien este color. Si el toro embiste es debido al movimiento de la tela.
Su origen
Las razas más comunes de bóvidos extendidas por el planeta se conformaron a finales del siglo XVIII y las españolas ya en el XX, pero en cuanto a la especie en sí, la vaca doméstica que conocemos, su origen se remonta a Oriente Medio, en lo que sería la actual Turquía, hace unos 11.000 años. Dos subespecies, el bos taurus taurus -nuestra vaca sin joroba-, y el bos taurus indicus, la vaca asiática, tipo cebú, son descendientes del uro -bos taurus primigenius- que se extinguió por desgracia hace unos 400 años.
Esperanza de vida
Aunque no se suele alcanzar esa edad en el contexto ganadero, la esperanza de vida de una vaca o un toro oscila entre los 20 y los 25 años. La vaca más vieja de la que se tienen registros es la mítica Big Bertha irlandesa, que alcanzó los 49 años después de haber parido al menos 39 terneros a lo largo de su vida.
Masticación
Los bóvidos dedican cerca de ocho horas al día a la ingestión de su alimentación. Cada animal ejercita el movimiento de su mandíbula al masticar unas 40.000 veces cada día. Son rumiantes, las primeras 10.000 masticaciones se producen durante la toma del alimento y las 30.000 restantes suceden después, cuando se regurgita el material semidigerido y se vuelve a masticar para deshacerlo aún más.
Comunicación y sociabilidad
Pese a lo que pueda parecer cuando pastan tranquilamente en un prado, las vacas son animales sociables. Recientes estudios han descubierto que “dialogan” entre ellas turnándose en el uso de la “palabra”, si entendemos por “palabra” los mugidos. Científicos australianos han analizado las voces de las reses y llegan a la conclusión de que las vacas usan su voz para mantener el contacto con el rebaño y expresar entusiasmo, excitación, compromiso o angustia.
Sin marearse
A modo de experimento y pensado para países con poca superficie disponible, existen granjas flotantes en Países Bajos donde se crían vacas. Una de ellas está situada en el puerto de Rotterdam. El techo de la misma recoge el agua de lluvia para que los animales beban, cuenta con paneles solares, también flotantes, para obtener la energía que requiere la instalación ganadera y en tierra firme, justo al lado de la granja anclada al puerto, hay un terreno para que las vacas puedan moverse. En un principio se sospechó que el movimiento del agua podría marear al ganado, y así lo denunciaron grupos ecologistas, pero un estudio de la Universidad de Utrech desmiente este extremo. El objetivo de este sistema de producción tan particular es acercar la producción a las ciudades -a las ciudades costeras, claro- y evitar, por ejemplo, emisiones derivadas del transporte por carretera.
Un abrazo vacuno
Es una tendencia en Estados Unidos y algún que otro país europeo, abrazar vacas para aliviar el estrés cotidiano. Incluso algunas granjas han visto esta posibilidad como un complemento a su actividad ganadera. La combinación del calor corporal y el animal y sentir los latidos de su corazón, que marca un ritmo mucho más lento que el corazón humano, se supone que produce sosiego y alivia la tensión, la ansiedad y el estrés de las personas que abrazan a la vaca. La clave reside en la liberación de oxitocina en nuestro organismo, una hormona que se produce en el hipotálamo y que está vinculada a las relaciones sociales o el placer sexual. Por otra parte, esta práctica también es una forma de conectar más con la naturaleza.
¿Por qué te contamos esto?
El grupo Operativo Sostvan tiene como objetivo darte datos relevantes que sirvan para que valores mejor la carne que estás comprando. De impacto ambiental, de rentabilidad de explotaciones extensivas, de calidad de vida de los animales… un montón de información muy relevante para ti, para el entorno rural y para el planeta. Sin embargo, hay una cosa que no te podemos dar a través de la trazabilidad blockchain: Cosas curiosas sobre las vacas y terneras que todos los granjeros conocen, pero no todos los consumidores.
Sobre el proyecto Sostvan
SOSTVAN es un proyecto innovador creado para mejorar el posicionamiento de la carne de vacuno extensivo en el mercado y asegurar la sostenibilidad económica de estas ganaderías. SOSTVAN defiende la producción ganadera de vacas nodrizas en un entorno medioambiental sostenible y respetuoso con el bienestar de los animales.
GO SOSTVAN ha sido propuesto como beneficiario de las ayudas a la ejecución de proyectos de innovación de interés general por grupos operativos de la Asociación Europea para la innovación en materia de productividad y sostenibilidad agrícolas, dentro del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020. La financiación de estas ayudas se realizará en un 60 por ciento con cargo al Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) y en un 20 por ciento con cargo al Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación.